REVISTA REPUBLICANA: Con el kirchnerismo en frente la unidad es firme, pero vienen tiempos difíciles. ¿Cómo crees que se hará para mantener la unidad de Juntos por el Cambio? ¿Y cuál crees que es el rol de Macri en todo esto?
GONZIVER: No creo que sea difícil mantener la unidad puesto que la parte más complicada se realizó: estar juntos luego del triunfo de Fernández en 2019 y haber atravesado de la misma manera su pico de popularidad del 75% en abril/mayo del 2020. Ahora, con la derrota en las PASO y los resultados del domingo, quedó claro dentro de Juntos por el Cambio que la unidad es indispensable. Sí podremos ver que existirán diversas líneas (halcones, palomas y tibios) que se armarán con miras a 2023, y allí está el rol principal de Macri -si es que no quiere participar en las PASO para presidenciales- como garante de esa unidad y confluencia de todas estas vertientes. Macri representa al padre fundador del movimiento, el primero en su estirpe, que logró desplazar al kirchnerismo del poder. Y su rol -insisto: si es que no se postula- será el de puntal para que la unidad siga vigente.
RR: ¿Qué expectativas tenés para este domingo ?
GZ: Esto depende del momento del día que me lo preguntes y de las noticias que van surgiendo. Porque a veces me dan ganas de revolear todo y me enojo con los nuestros, y por momentos quiero tener una urna al lado para meter el voto. Si ahora me obligás a responderte, considero que tendremos una importantísima victoria a nivel nacional, con aproximadamente 10 puntos de diferencia respecto del Frente de Todos, lo cual cambiará radicalmente las fuerzas en el Congreso y obligará al oficialismo a suplicar votos para sacar algunas leyes. Veo al gobierno de Fernández con un próximo terremoto político del cual aún no sabemos las consecuencias.
RR: Para las PASO el escándalo que destapaste de las visitas a Olivos pegó mucho. Ahora la agenda de esta semana parece girar en torno a la inseguridad. ¿Creés que este tema también va a impactar fuerte en las urnas?
GZ: Hay dos temas principales que se repiten en todas las elecciones y son los ejes sobre los cuales siempre giran las propuestas: economía e inseguridad. A nadie le importa si entró una vedette a Olivos o si le sacaron una foto a alguien en un cumpleaños. Los temas son siempre: dejame ganar dinero y dame seguridad. No hay otro.
Ahora bien, cuando a todos les prohibiste ganar plata durante un año y los obligaste a cerrar su negocio de toda la vida bajo la excusa de que si lo abrías provocabas muerte, pero ahora veo que te reías de tu DNU y comías torta con tus amigos, obviamente te voy a castigar con el voto.
Pero ahora, para las generales, está en boca de todos el segundo punto crítico: la inseguridad. Esa misma inseguridad que se había reducido con Patricia Bullrich en el ministerio y que percibimos ahora a la distancia: antes estábamos más seguros. Creo que sí impactará mucho.
RR: ¿Sentís que el escándalo de Olivos también impactó en el rol del periodismo durante estos meses ? ¿Notás algún cambio ?
GZ: El periodismo, como la Justicia, se mueve en torno al aroma político que se huele. De igual manera que la Justicia ahora empieza a desarchivar algunas causas, a moverlas, el periodismo también comienza a ser crítico del gobierno. No nos olvidemos de la tapa del “SuperAlberto” de abril del 2020. Creo que hubo una etapa del periodismo llorapauta que se desenamoró con el caso Olivos. He hablado con varios periodistas que me dijeron off the record: “siento que me estafaron, que me hicieron quedar como un bol*** porque fui uno de los que militó fuertemente la cuarentena eterna”. Y sí, quedaste así porque no tuviste pensamiento crítico y estabas contando los billetes de la pauta que pusieron para tu programa mientras sonaba bien decir: “quedate en tu casa”.
La información que se publicó en el Olivos Gate ya se sabía desde el año pasado. Ya estaba en los medios, pero nadie se atrevía a investigarla. Algunos periodistas me dijeron en 2020: “entró tal persona”, “es un lío dentro de Olivos”, “tal mujer fue a almorzar con Fernández”. Y todo en plena cuarentena estricta. No comprendo por qué nadie se atrevió a hacerlo. Después, todos sabían que era vox populi. Así que el periodismo seguirá siendo igual hasta que huela un cambio.
RR: ¿Qué pensas del fenómeno Milei?
GZ: No pienso mucho en Milei. Me asusta sí el impulso que tiene por parte de personas cercanas al oficialismo que lo están asesorando. Le sirve a Juntos por el Cambio -y así lo utiliza- para dos puntos: correr el eje hacia la derecha y para tomarlo como rival y minimizar al Frente de Todos.
Un buen uso que Juntos está haciendo es tomarlo de useful idiot para anclar la disputa entre Juntos y Avanza Libertad, dejando fuera del ring al Frente de Todos. Pero, en definitiva, creo que es un personaje que luego del 2021 se va a ir desarmando lentamente.